Una nueva instancia judicial en Viedma se sumó al largo y doloroso proceso que rodea el femicidio de Agustina Fernández en Cipolletti. Desde el penal, Pablo Parra escuchó en silencio cómo el Superior Tribunal de Justicia (STJ) de Río Negro rechazaba la queja presentada por su defensa. Fue una audiencia virtual breve, pero cargada de tensión. Así quedó ratificado el fallo condenatorio que todavía tiene su última instancia de apelación.
Los jueces anunciaron de forma verbal su decisión: no harían lugar al planteo. En los próximos días se conocerán los fundamentos escritos.
La escena estuvo atravesada por la presencia simbólica de Agustina: su familia pidió ser escuchada. Aunque no forman parte formal del proceso en esta etapa, el STJ le permitió tomar la palabra.
Cuestionamientos de la defensa, firmeza del Tribunal
El abogado defensor de Parra basó su presentación en supuestas irregularidades del juicio por jurados: cuestionó la validez del veredicto, la incorporación de prueba presuntamente contaminada y hasta la declaración de una expareja del imputado.
Alegó, además, una supuesta vulneración del derecho a no declarar y criticó cómo se resolvió la prórroga de jurisdicción.
El Fiscal General respondió que los agravios ya habían sido tratados por el Tribunal de Impugnación. Señaló que muchos planteos eran extemporáneos.

Ratificación de la condena por femicidio
La resolución del STJ ratificó lo resuelto por el jurado popular que en 2023 declaró culpable a Pablo Parra. El crimen de Agustina, cometido en Cipolletti, conmocionó a toda la región. Todavía resta una última instancia en la Corte Suprema para que el fallo adquiera total firmeza.